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El espacio sagrado y el profano: una actualización

``Para vivir en el Mundo hay que fundarlo, y ningún mundo puede nacer en el caos de la homogeneidad y de la relatividad del espacio profano``.

– Mircea Eliade

Mircea Eliade, conocido autor, estudioso de las religiones, nos ha heredado una serie de categorías en torno al lenguaje simbólico que no llegamos a reconocer por la naturalidad con las que las utilizamos. “Lo sagrado y lo profano” * es una obra escrita en el año 1957 que describe la importancia de la diferenciación del espacio en el contexto de las sociedades tradicionales.

Hablar del espacio sagrado no sólo alude a una hierofanía y a la fundación de un espacio sagrado, también nos habla de de una diferenciación esencial: no todos los lugares son iguales.

Eliade nos recuerda que todos queremos vivir en el Centro, o por lo menos, cerca de este. Es así como podemos abrevar de la vida, pues como él mismo advierte: “el Centro está dotado de ser”. 

¿Cómo entender estas ideas del el mundo actual? La modernidad se distingue por su carácter secular. Pareciera que las nociones de la sociedad tradicional que describe Mircea Eliade han perdido toda vigencia lo que nos lleva a pensar que todos los espacio son idénticos en cuanto a su valor, que no existe diferenciación, ni jerarquías entre distintos lugares. ¿Es así?

Si bien no pertenecemos a una sociedad tradicional y nuestro mundo es más bien secular,  las categorías de lo sagrado y lo profano nos ayudan a distinguir aquello que es deseable para los seres humanos. Debe haber una diferenciación entre ese espacio que no nos dice nada, que no está cuidado y aquel donde late una “buena vida”. Por “buena vida” me refiero a la posibilidad de un espacio seguro, de serenidad, de tranquilidad, de belleza y de encuentro. ¿Podemos fundarlo?

 * Eliade, Mircea. Lo sagrado y lo profano.