Goethe, el Primer Parquero
La naturaleza y el arte parecen reunirse antes de lo que se cree
– Goethe
Johann Wolfgang von Goethe (1749-1832) es mayormente conocido por su monumental obra literaria. Su faceta como científico pasa desapercibida y es sabido, a través de distintos documentos, que su amor a las plantas y animales le brindó una fuente inagotable de gozo. Como representante del movimiento romántico, Goethe encontraba en la naturaleza un caudal de armonía y potencia creadora Obras como la La metamorfosis de las plantas y Teoría de los colores dan muestra de la visión holística que caracterizaba a este contemplador de la naturaleza.
Mi obra poética no me hace sentir vanidad alguna. En mi tiempo ha habido algunos excelentes poetas, otros todavía mejores han vivido antes que yo, y aun otros me seguirán. Pero que yo sea el único que en mi época se ha sabido orientar en la difícil ciencia de los colores, de esto sí que me envanezco un poco, y por esta causa, en cierto modo, me siento superior``
– Eckermann en Conversaciones con Goethe de 1829
EL Park an der Ilm o El Parque en el Ilm tiene una extensión de 40 hectáreas. Se encuentra en la ciudad de Weimar y debe su nombre al río que atraviesa el parque. Goethe vivió en esta ciudad a partir del año 1775. Tuvo la oportunidad de hacerse de una casa y se quedó a vivir ahí definitivamente. Poco a poco fue diseñando el jardín de su propiedad hasta irse involucrando en el diseño del parque. Él mismo fue quien dispuso la conformación de caminos, la elección de los árboles y la topografía general del lugar.
Pensar en Goethe como el primer parquero nos puede inspirar y hacernos partícipes de un cuidado de las ciudades de las que pocos autores tienen conciencia. Fue un pionero y a la vez hizo confluir los dos ámbitos de belleza: la naturaleza y el arte.